viernes, 11 de diciembre de 2015

Galletas de naranja y semillas de amapola



Estas galletas son muy ricas y muy saludables, por lo que no las puedes dejar de preparar. Las semillas de amapola resultan saludables por su contenido en ácidos grasos insaturados, antioxidantes y calcio. Las infusiones realizadas con estas semillas pueden tener un efecto relajante en momentos de ansiedad, e incluso facilitar la expectoración en casos de tos y resfriados. Son perfectas para los niños. A continuación la receta.

Ingredientes
2½ tazas de harina todo uso
2 cucharaditas de polvo para hornear
½ cucharadita de sal
½ cucharadita de cardamomo molido
2 cucharadas de semillas de amapola
1 ½ tazas de azúcar
naranjas ralladas
3 huevos
½ taza de mantequilla sin sal
2 cucharaditas de vainilla
2 cucharadas de jugo de naranja
1 (15 onzas) de queso ricotta

Para el glaseado
1 ½ tazas de azúcar en polvo
3 cucharadas de jugo de naranja
1 naranja rallada

Preparación
Precalentar el horno a 350°. Forrar dos bandejas para hornear con papel pergamino. Poner a un lado. En un tazón mediano, combinar la harina, el polvo de hornear, sal, cardamomo y semillas de amapola. Mezclar con un batidor para combinar bien. Poner a un lado.
En un tazón grande, combinar el azúcar y la ralladura de naranja. Mezclar con los dedos hasta que el azúcar es húmedo y fragante. Añadir la mantequilla a la mezcla y batir hasta que quede suave y esponjosa. Añadir los huevos, uno a la vez, hasta que se incorpore. Batir el jugo de naranja, vainilla y la ricotta. Raspar el fondo del recipiente y batir por un minuto más para asegurarse de que todo está incorporado.
Poco a poco agregar los ingredientes secos y mezclar hasta que se incorpore. La masa estará húmeda y un poco pegajosa debido al queso ricotta. Añadir una o dos cucharadas de masa para cada galleta en una bandeja para hornear. Hornear durante 16-18 minutos, hasta que esté ligeramente dorada en los bordes. Retirar del horno y dejar reposar en la bandeja del horno durante 5 minutos. Transferir a una rejilla y dejar enfriar completamente.
Mientras las galletas se enfrían, hacer el glaseado. En un tazón pequeño, combinar el azúcar en polvo, jugo de naranja y la ralladura. Batir hasta que quede suave. Esparcir alrededor de una cucharadita de la mezcla en la parte superior de cada galleta. Dejar endurecer el glaseado antes de servir. Disfrute!

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